domingo, 22 de abril de 2012

MEDIACIÓN EN EDUCACIÓN INFANTIL


La mejor forma de resolver los conflictos que surgen en estas edades de infantil es a través de la mediación y no de los castigos. Es mejor solucionar los problemas hablando con los niños e intentando que desde pequeños aprendan a comunicar sus emociones y los hechos ocurridos.
Para que haya una mediación se necesita la presencia de uno o varios mediadores, en el caso de Infantil se necesitaría a la tutora. Lo importante es que el mediador sea imparcial.
Para hacer una mediación de forma adecuada se atendería a los siguientes pasos:
1º Contar el problema.
2º Preguntar a cada uno de los implicados cómo se ha sentido con lo sucedido.
3º El mediador hace un resumen del problema y les pregunta a los implicados para sacar conclusiones.
4º Se ponen cada uno en el lugar del otro y dicen cómo creen que se sentirían.
5º Se proponen soluciones.
6º Se elabora un acuerdo y se compromete cada parte a algo.
El mediador debe mostrar interés y escuchar. Se tiene que encargar de clarificar, resumir y reflejar los hechos.
En el caso de los niños, la mediación es mejor hacerla en el momento del conflicto, en el mismo día. Primero se les deja calmarse. En el caso de que los niños sean un poco mayores y dependiendo de la gravedad del conflicto, también pueden intervenir los padres.
Como esta es una mediación para Infantil, es la maestra quien propone las soluciones y el acuerdo al que se llega.
Para hacer que los niños se expresen mejor utilizaríamos juegos, canciones, pinturas… Para que consigan contar mejor lo que ha pasado.
Un ejemplo sería:

En una clase de 2º de Infantil Mateo quería beber del zumo de Nerea y ésta no le ha dejado. Entonces Mateo le ha tirado el zumo al suelo y Nerea le ha mordido en el brazo.
Como los niños están alterados, la maestra los separa y les dice que hablarán de lo sucedido en la hora del recreo.
La maestra se queda con ambos en el recreo y les pide que hagan un dibujo en el que expresaran lo que ha ocurrido.

Tras hacer el dibujo la profesora le pide a cada uno que explique lo sucedido.
Luego le dice a Mateo que como se sentiría el si Nerea le hubiese tirado su zumo por no querer dejárselo. Mateo reconoce que se hubiera enfadado y a lo mejor hubiera actuado de la misma forma.
Tras ello le pregunta a Nerea como se hubiese sentido si Mateo no le hubiera querido dar un poco de zumo y luego la hubiese mordido. Nerea reconoce que se hubiera sentido mal y que no debería haberle mordido y que podría haberle dado un poco de zumo.

La profesora intenta hacerles ver a cada uno que está bien compartir, pero que si la otra persona no quiere compartir la violencia no es la solución. Para ello se ayuda diciéndoles a los niños que tienen que encontrar entre ambos un tesoro. A Mateo le da las señas de dónde está escondido el tesoro y Nerea (que tiene una venda en los ojos) tendrá que seguir las instrucciones de Mateo y encontrar el tesoro. Es una forma de que jueguen juntos y cooperen.
A parte de esto, la maestra intentará poner a los niños juntos en algunas de las actividades que se hagan en el aula, para mejorar su relación.
Rocío García Álvarez

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